Sony Ericsson asegura que como fabricante de teléfonos móviles no se siente “responsable” del retraso de la implantación de la tercera generación (UMTS) en España, dado que tenía disponibles terminales con esta tecnología desde el año pasado, según manifestó el director general de la compañía en España y Portugal, Raúl Ortiz.
Durante la presentación de la nueva gama de productos del grupo, Ortiz aseguró que el retraso en el desarrollo del UMTS “no se ha producido por no haber terminales“. “No nos sentimos responsables de que no se haya podido iniciar el servicio por falta de terminales“, insistió.
Asimismo, recordó que como fabricante Sony Ericsson no tiene ningún tipo de compromiso con la Administración, como les sucede a las operadoras, y que se limita a poner en el mercado terminales para que aquéllas puedan prestar servicio, lo que ha hecho “desde hace más de un año, pero entonces no estaban desplegadas las redes“.
Sony Ericsson cerró el ejercicio 2003 con una cuota de mercado del 8,5 por ciento en España, muy superior a la del año anterior, y en 2004 aspira a alcanzar una participación en el mercado de dos dígitos, es decir, de un mínimo del 10 por ciento, según Ortiz.
No obstante, su gran reto es llegar a este objetivo con productos cuyo precio medio supere la media del sector en España, que se caracteriza por el predominio de los terminales de gama “muy baja”, según el responsable de Sony Ericsson.
Ortiz indicó que, a pesar de que la distribución de teléfonos móviles en España está claramente dominada por las operadoras, la “joint venture” está intentando aprovechar el valor de la penetración en el mercado de electrónica de consumo de Sony, una de sus matrices.
Sony Ericsson está realizando el lanzamiento mundial de los nuevos productos de su gama, entre los que se encuentran los terminales multimedia K700 y S700, las tarjetas para PC GC83 y GC85 y diversos accesorios Bluetooth.
Fuente: Agencias
12 – 04 – 2004