Desde ayer, Vodafone ha comenzado a comercializar en España y Alemania servicios de telefonía móvil de tercera generación (UMTS) con la puesta a la venta de tarjetas “G3”, que permiten disponer de Internet a gran velocidad en ordenadores portátiles, de tal modo que la operadora arrancará la comercialización de las nuevas tarjetas “G3” en las siete principales capitales -Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Bilbao, Zaragoza y Málaga-, para extenderla en otoño a otras 16 ciudades españolas con el objetivo de ofrecer la nueva tecnología en todas las ciudades de más de 20.000 habitantes en el plazo de dos años.
Hay que destacar como Vodafone destinará gran parte de la inversión de 2.900 millones de euros que prevé ejecutar en España en los próximos cinco años a este objetivo. La inversión de la filial española del gigante británico alcanzó los 450 millones de euros en 2003, y del mismo modo que sucederá entre los ejercicios 2004-2005 y 2008-2009, la mayor parte de esta cifra estuvo destinada al despliegue de infraestructuras de telefonía móvil de tercera generación.
Las tarjetas “G3” están dirigidas principalmente a empresas, dado que sólo permiten disfrutar de UMTS en un ordenador portátil, al que se pueden extender así las aplicaciones informáticas que habitualmente se utilizan en los lugares de trabajo, como son Internet y el correo electrónico. No hay que olvidar, en cambio, que Vodafone prevé lanzar en octubre servicios UMTS a través de terminales de telefonía y poner así a disposición del público en general servicios de Internet a través del móvil, una vez completen las pruebas que actualmente se realizan.
Redacción Centro de Contacto
17 – 02 – 2004